jueves, 31 de enero de 2019

Reseña de "El retorno del rey" (El señor de los anillos #3) de J.R.R Tolkien


¡Hola, hola! ¡Segunda reseña del día! Me entusiasmé tanto escribiendo la reseña de la primera parte que horas después ya tenía ésta. Y pensé, ¿por qué no publicarlas las dos juntas? Así con esto cerramos todas las reseñas de la saga (aunque aún me queda por leer El Silmarillion, pero eso será algo aparte).


Libro: El retorno del rey
Saga: El señor de los anillos
Autor: J.R.R. Tolkien
Editorial: Minotauro








Los ejércitos del Señor Oscuro van extendiendo cada vez más su maléfica sombra por la Tierra Media. Hombres, elfos y enanos unen sus fuerzas para presentar batalla contra Sauron y sus huestes. Ajenos a estos preparativos, Frodo y Sam se internan cada vez más en el país de Mordor en su heroico viaje para destruir el Anillo de Poder en las Grietas del Destino.








“El señor de los Anillos III, El Retorno del Rey”, es la última entrega de esta maravillosa saga, y déjenme decirles que es un libro É-P-I-C-O. 

“Las hazañas no son menos valerosas porque nadie las alabe”

No esperaba que la conclusión fuera tan emocionante. Si el primer libro se encargaba de sentar las bases para que pudiéramos comprender los conflictos posteriores, en esta tercera entrega todo explota.

Para empezar, contiene varias escenas de batallas. A lo largo de sus páginas apenas sí tendremos un minuto de respiro. Los enfrentamientos están llenos de estrategias y momentos en los que los personajes tienen oportunidad de lucirse de manera espectacular, por lo que resultan muy emocionantes de leer. Y algunos incluso tienen giros interesantes, con apariciones y reapariciones de antiguos personajes que llegan cuando menos te lo esperas.

“—¡Si yo hubiera! ¡Si yo hubiera! —exclamó—. Todas esas palabras, todos esos si son vanos. Ahora va camino de la Sombra, y sólo el tiempo dirá lo que el destino prepara, para el objeto y para nosotros. En el plazo que aún queda, que no será largo, que todos los que luchan contra el Enemigo cada uno a su manera se unan, y que conserven la esperanza mientras sea posible, y cuando ya no les quede ninguna, que tengan al menos la entereza necesaria para morir libres”.

Aunque por lo general siempre es Aragorn quien se lleva toda mi atención en estas batallas, quiero destacar también la actuación de Faramir, el hermano de Boromir al que ya conocimos en el tomo anterior, que en esta entrega se revela como un guerrero tan válido como nuestro querido Trancos.

“Es valiente, más valiente de lo que muchos suponen; pues en estos tiempos los hombres no quieren creer que alguien pueda ser un sabio, un hombre versado en los antiguos manuscritos y en las leyendas y canciones del pasado, y al mismo tiempo un capitán intrépido y de decisiones rápidas en el campo de batalla”.

Tampoco puedo dejar de mencionar a Eowyn, un personaje femenino que brilla por realizar hazañas que están totalmente altura de las que llevan a cabo los personajes masculinos de la saga, y que sorprende por salirse del esquema —tan habitual en los libros de fantasía épica que ya tienen sus años—, de damisela en apuros y dama-trofeo. Incluso me ha gustado cómo se desarrolló el tema de sus sentimientos por Aragorn y el final que tuvo.

“Ya bastante he esperado con las rodillas flojas. Si ahora no me tiemblan, parece, ¿no puedo vivir mi vida como yo lo deseo?”


Pero, como ya pudimos comprobar en el libro anterior, esta no es solamente una historia de grandes guerreros, hombres y mujeres armados, nobles a caballo y ejércitos innumerables. Es también una historia de héroes inesperados, de pequeñas personas, de gente común que encuentra la valentía en su interior para enfrentarse a la adversidad. Así, asistimos también al crecimiento y envalentonamiento de Merry y Pippin, que ya habían jugado un papel muy importante reclutando a los Ents en el libro anterior, y que aquí se tienen que enfrentarse al peligro de estar metidos en medio de una importante batalla.

 “—Donde no falta voluntad, siempre hay un camino, decimos nosotros —susurró—, y yo mismo he podido comprobarlo”.

Y por supuesto, en esta categoría de “héroes inesperados” también entran Frodo y Sam, que siguen lidiando como pueden contra los orcos de Mordor, las sombras y la desesperanza.

Como ya he mencionado en mi reseña anterior, no puedo evitar sentir un gran cariño hacia Sam. No es un gran guerrero, como los personajes anteriormente mencionados, pero es precisamente por eso que sus intentos por rescatar a Frodo de los orcos me parecieron absolutamente valientes y meritorios. Gracias a su lealtad y bondad, logra suplir en buena parte su falta de habilidad con las armas.

Frodo, por su parte, hace un gran trabajo resistiendo la oscuridad que trae consigo el anillo. Es necesario mencionar que, en este sentido, cumple un rol en la historia muy diferente al que estamos acostumbrados a asociar con los protagonistas de fantasía épica. No es un gran mago, ni el líder de un ejército, ni un elegido con poderes especiales: es el portador de un objeto maldito y su principal víctima. En ningún momento pasa a primer plano como hombre de acción, sino que sufre en todo momento y debe soportar su carga lo mejor que puede hasta llegar al final. Pero es esta perseverancia y resistencia contra la corrupción del poder lo que lo convierte en un héroe.

En lo que se refiere a Gollum… No voy a hablar demasiado para no spoilear a los que no se han leído el libro ni se han visto las películas, pero les diré que me resulta muy llamativo el giro que le da Tolkien a su personaje.

“Traición, una traición, eso es lo que temo: una traición de esa criatura miserable. Pero así tenía que ser. Recordemos que un traidor puede traicionarse a sí mismo y hacer involuntariamente un bien. Ocurre a veces. ¡Buenas noches!”

¿Y qué puedo decir del final? Creo que nunca he leído una conclusión de saga que me haya emocionado tanto como la de este libro. En parte, creo que se debe a que Tolkien no concluyó la historia precipitadamente una vez alcanzado el clímax de la trama, sino que se tomó su tiempo para contarnos en qué estado emocional quedaron todos sus personajes al concluir la guerra. Y no me refiero a que incluyó un capítulo del estilo “unos años más tarde” —aunque también tenemos uno de estos— hacia el final del libro, sino que se tomó la molestia de hablarnos del impacto que causó en todos la guerra nada más finalizar; nos refiere las pérdidas que tuvieron que llorar algunos personajes, las victorias que se encargaron de celebrar más tarde, las reuniones y reencuentros que se produjeron, las relaciones inesperadas que se forjaron, e incluso, los traumas y posos de amargura que se formaron en el corazón de algunos personajes. Por momentos, Tolkien resulta desgarrador y realista, pero también deja espacio para el amor y la esperanza. Además, en todo momento hace hincapié en el enorme crecimiento que se produjo en muchos de sus  personajes durante el viaje, y en cómo esto resulta importante para que puedan transformar su entorno en el futuro.

“Tendréis que enderezar vosotros mismos los entuertos: para eso habéis sido preparados. ¿No lo comprendéis aún? Mi tiempo ha pasado ya: no me incumbe a mí enderezar las cosas, ni ayudar a la gente a enderezarlas. En cuanto a vosotros, mis queridos amigos, no necesitaréis ayuda. Ahora habéis crecido. Habéis crecido mucho en verdad: estáis entre los grandes, y no temo por la suerte de ninguno de vosotros”.

Así, este libro concentra en su interior toda lo bueno que debe tener un libro de fantasía épica. Los enfrentamientos no son meras descripciones de espadas que se entrecruzan y caballos que galopan; son agitación, son incertidumbre y acción. Y las escenas más tranquilas que transcurren entre batalla y batalla no son escenas de relleno; son momentos significativos en las cuales los personajes estrechan sus lazos, en las que procesan todo lo que les ha pasado y se transforman. Todo eso confluye al final, por lo que la emoción está asegurada. Y si a esto le agregamos la maravillosa prosa de Tolkien, que dota de belleza a todos los escenarios donde transcurre la historia, a cada diálogo que los personajes pronuncian, y a todas las escenas de alto contenido épico que se producen, el deleite está asegurado.

No me queda más que recomendarles esta saga con todas mis fuerzas a los amantes de la fantasía en particular y a los de las buenas historias en general. Estoy segura de que no se arrepentirán de leerla.


¿Y ustedes qué me dicen? ¿Leyeron alguno de los libros o vieron las películas? ¿Les gustó? ¡Cuéntenme en los comentarios!

Reseña de "Las dos torres" (El señor de los anillos #2) de J.R.R. Tolkien

¡Hola a todos! Hace unas semanas se conmemoró el aniversario del nacimiento de J. R. R. Tolkien y quise subir la reseña de este libro ese mismo día para celebrarlo, pero no logré terminarla a tiempo. Así que, una vez perdido el tren, me dediqué a terminar esta entrada con calma. Ahora que está lista, la subo sin más demora, porque todo día es bueno para hablar de Tolkien.


Libro: Las dos torres
Saga: El señor de los anillos
Autor: J.R.R Tolkien
Editorial: Minotauro






La Compañía se ha disuelto y sus integrantes emprenden caminos separados. Frodo y Sam continúan solos su viaje a lo largo del río Anduin, perseguidos por la sombra misteriosa de un ser extraño que también ambiciona la posesión del Anillo. Mientras, hombres, elfos y enanos se preparan para la batalla final contra las fuerzas del Señor del Mal.











Las dos Torres retoma la historia justo en el punto en donde la dejamos en el libro anterior. Frodo y Sam han cruzado el río, logrando escapar por los pelos de Boromir, mientras que el resto de la compañía ha tomado caminos separados.

El libro está dividido en tres partes bien diferenciadas, y en cada una seguimos las aventuras y desventuras de diferentes miembros de la compañía. Quisiera destacar especialmente el tramo del libro que protagonizan Merry y Pippin, porque me pareció uno de los más entrañables de todos cuantos he leído. Nuestros queridos, hambrientos y torpes hobbits se encontrarán con una de las razas más interesantes del mundo creado por J.R.R. Tolkien: los Ents, unos árboles milenarios que pueden hablar y moverse lentamente por el bosque, y que resultarán de gran ayuda para su misión. No puedo explicarles lo que disfruté leyendo sobre la forma de vida de los Ents. Si bien nuestros hobbits se desesperan con la lentitud de estos árboles para hacer cualquier cosa, lo cierto es que es ese mismo ritmo pausado lo que les permite debatir con calma alguna decisiones y tomar las decisiones correctas llegado el momento. Son un homenaje maravilloso a la naturaleza y a la sabiduría de antaño.

Mientras tanto, Aragorn, Legolas y Gimli conocerán a unos cuantos personajes que jugarán un papel importante en la guerra, como Éomer, sobrino del rey de Rohan, o la joven Eowyn, que si bien no termina de lucirse en este libro, tendrá una gran relevancia en el tercero.

¿Y Frodo y Sam? Su parte de la travesía fue otra de mis favoritas. Casi puede sentirse el peligro a medida que se acercan a Mordor. Y en medio de todo esto se pondrán a prueba las lealtades y las dudas cuando se reencuentren con cierto personaje en el que aún no saben si pueden confiar o no…


También quisiera mencionar esta reseña el maravilloso momento metaliterario que queda plasmado en  la conversación que Sam mantiene con Frodo respecto a las historias, mientras intentan mantener la esperanza en medio de las tinieblas de Mordor. Lo reproduzco casi en su totalidad a continuación porque realmente me encanta:

—(…) Yo pensaba que los personajes maravillosos de las leyendas salían en busca de aventuras porque querían tenerlas, y les parecían excitantes, y en cambio la vida era un tanto aburrida: una especie de juego, por así decir. Pero con las historias que importaban de veras, o con esas que uno guarda en la memoria, no ocurría lo mismo. Se diría que los protagonistas se encontraban de pronto en medio de una aventura, y que casi siempre ya tenían los caminos trazados, como dice usted. Supongo que también ellos, como nosotros, tuvieron muchas veces la posibilidad de volverse atrás, sólo que no la aprovecharon. Quizás, pues si la aprovecharan tampoco lo sabríamos, porque nadie se acordaría de ellos. Porque sólo se habla de los que continuaron hasta el fin… y no siempre terminan bien, observe usted; al menos no de ese modo que la gente de la historia, y no la gente de fuera, llama terminar bien.  Usted sabe lo que quiero decir, volver a casa, y encontrar todo en orden, aunque  no exactamente igual que antes… como el viejo señor Bilbo. Pero no son esas las historias que uno prefiere escuchar, ¡aunque sean las que uno prefiere vivir! Me gustaría saber en qué clase de historia hemos caído.
—A mí también —dijo Frodo—. Pero no lo sé. Y así son las historias de la vida real. Piensa en alguna de las que más te gustan. Tú puedes saber, o adivinar, qué clase de historia es, si tendrá un final feliz o un final triste, pero los protagonistas no saben absolutamente nada. Y tú no querrías que lo supieran.

Después de estas palabras, Sam refiere brevemente la historia de Beren y cómo consiguió el Silmaril, y señala que ahora Frodo tiene un poco de la luz de éste en el cristal de estrella que le regaló la Dama Galadriel. Y entonces, exclama:

—(…) Cáspita, pensar… pensar que estamos todavía en la misma historia. ¡Las grandes historias no terminan nunca?
—No, no terminan nunca como historias —dijo Frodo—. Pero los protagonistas llegan a ellas, y se van cuando han cumplido su parte. También la nuestra terminará, tarde… o quizás temprano.

(¿No les encanta?)

En este libro hay reencuentros, grandes planes, caminos que se entrecruzan, batallas, giros inesperados y momentos épicos. Pero lo que más destacan son sus personajes. Algunos de ellos son héroes clásicos en toda regla, como Aragorn, siempre fuerte y valeroso, pero también hay espacio para los héroes más atípicos, como Frodo y Sam, que desde su humilde condición de hobbits deben cargar con la parte más importante de la misión.

—Los planes grandes e importantes no son para los de mi especie. Me pregunto sin embargo si algún día apareceremos en las canciones y en las leyendas. Estamos envueltas en una, por supuesto; pero quiero decir: si la pondrán en palabras para contarla junto al fuego, o para leerla en un libraco de letras rojas y negras, muchos, muchos años después. Y la gente dirá: “¡Oigamos la historia de Frodo y el Anillo!”. Y dirán: “Sí, es una de mis historias favoritas. Frodo era muy valiente, ¿no es cierto, papá?”. “Si, hijo mío, el más famoso de los hobbits, y no es poco decir”.
—(…) Pero te has olvidado de uno de los personajes principales: Samsagaz el intrépido. “¡Quiero oír más cosas de Sam, papá! ¿Por qué no ponen más de las cosas que decía en el cuento?  Eso es lo que me gusta, me hace reír. Y sin Sam, Frodo no habría llegado ni a la mitad del camino, ¿verdad, papá?”.

(He dejado esta cita para el final porque yo también creo que Sam ha sido tan importante en esta misión como Frodo, y porque es un amigo muy leal y valiente y merece que le hagan una estatua al final de la saga).


En conclusión, este segundo libro es una buena continuación para la saga, que profundiza en las relaciones entre los personajes y nos muestra más territorios de la grandiosa geografía creada por Tolkien. No obstante, como alguien que ya ha leído el tercer libro, diré que no es nada en comparación con lo que nos espera más adelante.


¿Ustedes qué opinan? ¿Han leído el primer libro? ¿Y el segundo? ¡Cuéntenme en los comentarios!

sábado, 12 de enero de 2019

"El secreto de Xein" (Guardianes de la Ciudadela #2) de Laura Gallego



¡Hola a todos! ¿Cómo están pasando el verano? ¿Alguien más está aprovechando los días con sol para leer afuera o junto a la ventana hasta tarde? Yo estuve leyendo “El secreto de Xein” de Laura Gallego, y ahora no puedo esperar a que salga el tercero.




Libro: El secreto de Xein
Saga: Guardianes de la Ciudadela
Autora: Laura Gallego

Editorial: Montena





Xein, por su parte, se ha convertido en uno más de los Guardianes que protegen a los habitantes de la Ciudadela de los monstruos que los acechan. Su lealtad a la Guardia lo obliga a mantener sus nuevos conocimientos ocultos para el resto de la gente y especialmente para Axlin, lo cual levantará un nuevo muro entre los dos. Todo ello causará conflictos entre ambos cada vez que vuelvan a encontrarse, pero también hará saltar chispas que arderán con más fuerza a causa de su pasado en común.







¡Atención! No leas esta reseña si no has leído la primera parte. Habrá spoilers por todas partes.


Esta segunda parte de la saga me ha gustado mucho y ha superado mis expectativas en lo que se refiere a las relaciones entre los personajes y el desarrollo del mundo donde transcurre la historia

Muchos dicen que este libro es aún mejor que el primero, pero a mí me resulta difícil compararlos. “El secreto de Xein” tiene una estructura completamente distinta a la de la primera parte. Mientras que en “El bestiario de Axlin” recorríamos distintos enclaves y seguíamos las aventuras de la protagonista por los caminos, en esta segunda parte nos paseamos por las calles de la Ciudadela para investigar los ataques de distintos monstruos y conocer más acerca de las vidas de los ciudadanos comunes. Ambas estructuras son muy diferentes, y sin embargo, me han gustado por igual.

“A menudo tenía la sensación de que los habitantes de la Ciudadela dedicaban demasiado tiempo a preocupaciones triviales. Probablemente, porque sabían que tenían toda la vida por delante. En las aldeas del oeste uno nunca podía dar eso por sentado.”

Dex, que continúa trabajando en la biblioteca junto a Axlin, se encuentra atravesando algunos problemas personales bastante complicados. Una chica embarazada, un familiar cercano sin muchos escrúpulos, un malentendido, una persona muy importante para él y un legado familiar injusto, componen un peculiar rompecabezas que los personajes deberán intentar dilucidar. Aunque al principio puede parecer que este conflicto es apenas una subtrama dentro de la historia, lo cierto es que llega a tener bastante peso, pues se relaciona con problemas mucho más grandes que están teniendo lugar en la Ciudadela.

Las defensas de “el lugar más seguro del mundo” parecen estar cayendo poco a poco. Los ataques de monstruos aumentan y ponen en peligro a sus habitantes. Pero eso no es todo: Xein descubre que las horripilantes criaturas contra las que ha luchado a lo largo de su vida no son las únicas que amenazan la seguridad de las personas. Existen otras, mucho mejor camufladas y casi imperceptibles, que pueden resultar más peligrosas que los monstruos comunes.

Y todo se vuelve aún más complicado cuando advierte el gigantesco abismo que separa a los Guardianes de la Ciudadela de los ciudadanos comunes; porque, a medida que pasa el tiempo, comienza a entender los motivos por los cuales jamás debe relacionarse con ellos. Con todo esto mente, no debería tener motivos para continuar pensando en Axlin. Y sin embargo… Ay, qué difícil es olvidarla cuando ella se aparece en todos los lugares en los que él se encuentra para recolectar más información sobre los monstruos que atacan la Ciudadela.

“Después de todo, estaba en la naturaleza de los monstruos atacar y devorar personas. Pero los seres humanos podían elegir. Y todos, especialmente los Guardianes, superiores a la gente corriente, eran responsables de sus propios actos”.

“¿Cómo explicarle a Axlin que él jamás haría daño a otro ser humano? ¿Qué estaba en su naturaleza protegerlos, velar por ellos…, especialmente por Axlin y las personas que le importaban?”.

En mi reseña anterior mencioné que había un personaje que me caía muy bien y que tenía todos los papeles para convertirse en uno de mis favoritos, pero no mencioné su nombre porque temía que fuera un spoiler. Ahora que estamos en la reseña del segundo libro —y que doy por supuesto que ya leyeron el primero o que no les importa spoileárselo entero— me permito decir que ese personaje es Rox, la compañera de patrulla de Xein.  Me agrada que sea la contracara del joven al ser mucho más disciplinada y estricta, aunque queda claro que es capaz de romper algunas normas cuando la situación lo requiere. Estoy muy interesada en saber más cosas sobre ella —se adivina un pasado muy trágico a sus espaldas— y en profundizar en su punto de vista, que sin duda será mejor tratado en la tercera parte de la historia.

También confieso que soy fan de todos los “dichos” de la ciudadela, como “Un día se te olvidará cortarte el pelo” —utilizado para referirse a personas despistadas, en referencia a los monstruos que te agarran de los pelos para atacarte y por los cuales hay que cortarse el pelo para defenderse—, o el de “estar más aburrido que un caparazón dormido”.

“La verdad es una joya de múltiples facetas”

Hacia la mitad del libro se produce una revelación que me dejó con la boca abierta. Confieso que en algún momento del primer libro llegué a plantearme esta posibilidad, pero no me detuve a pensar en todas las implicancias que tendría para los personajes y el argumento en general. ¡Y aún quedan muchas cosas por saber!

“Ninguna institución está al margen de los abusos de poder—cortó Oxania con rabia—. Tampoco la Guardia de la Ciudadela”.

La acción está bien balanceada. Es incluso más constante que en el primer libro, y cada escena de acción está totalmente justificada dentro de la trama, por lo que no se convierte en un recurso más para “despertar” al lector.  Por otra parte, si bien la Ciudadela no resulta un ambiente claustrofóbico en sí mismo, la historia sí que transmite una sensación de peligro y desconfianza que no te permite bajar la guardia en ningún momento. Ya verán por qué. Además el libro comienza a desarrollar una mitología propia, que puede resultar importante para comprender la historia al completo.

Con todo lo que acabo de decir, creo que queda claro que definitivamente voy a leer la tercera parte. Se intuye que va a haber muchas más revelaciones y no puedo esperar a saber cuáles serán. ¡Sólo espero que Laura Gallego no nos haga sufrir mucho!


¿Y ustedes que dicen? ¿Leyeron la primera parte? ¿Y la segunda? ¡Cuéntenme en los comentarios!

martes, 1 de enero de 2019

Mejores lecturas del 2018


¡Hola, hola! ¡Feliz 2019! ¿Cómo han empezado el año? Yo muy bien, ¡con muchas ganas de blogguear! Para este año tengo preparadas varias entradas que espero que les gusten. Como siempre, voy a seguir subiendo reseñas, pero también pienso estar más activas con los Book Tags y Tops de libros, y veré si puedo traerles alguna nota especial de vez en cuando. El año pasado me la pasé muy bien programando todas las entradas y espero repetir la experiencia este 2019.


Hoy les traigo el listado de mis lecturas favoritas del 2018. Al principio quería hacer un Top Ten, pero luego me di cuenta de que se me da muy mal posicionar un libro por encima de otro —más allá de que tengo mis preferencias, soy de las que piensan que dos libros te pueden gustar por igual de forma muy distinta y no me gusta enfrentarlos—, así que finalmente me decanté por hacer este simple listado. Los libros no están en un orden particular y son tanto clásicos como libros juveniles actuales y otras novelas para adultos. ¡Espero que les guste! 

***

Libros favoritos que leí en 2018


"Esa lejana barbarie" de Cristina Bajo.  




No he reseñado esta saga en el blog todavía porque tengo pendiente releer el primero, que me prestaron hace tiempo, para poder emitir una opinión más completa; pero a pesar de eso, no podía dejar de recomendarla en este listado.  Este libro es el último de  “La saga de los Osorio”, una serie de cinco libros de romance histórico que se enfocan en distintos miembros de una familia adinerada de Córdoba durante la época de los enfrentamientos entre Unitarios y Federales. La saga está muy bien escrita, con una prosa exquisita y una ambientación que te remonta inmediatamente a la Córdoba de por aquel entonces, sin mencionar que todos los personajes son excelentes y están muy bien caracterizados, con sus propios secretos y lealtades, romances turbulentos, prejuicios y odios, y por supuesto, conflictos familiares.  Se me partió el corazón un par de veces mientras leía este libro —aunque nada nunca superará el dolor que sentí cuando pasó cierta cosa en el tercer volumen de la saga—, y me emocioné otras tantas veces más, por lo que lo recomiendo muchísimo. Además, en este libro en particular no sólo leemos lo que pasa en Córdoba sino que también acompañamos a uno de los personajes a Europa y vemos cómo se codea con distintos artistas y escritores de la época… Así que puede que los lectores encuentren más de un nombre conocido entre sus páginas.


"La guerra de los Pájaros" de Victoria Bayona



Último libro de la saga “Los Viajes de Marion”. Creo que este fue uno de mis favoritos. Aunque no tiene tantos momentos de acción como el segundo libro, está cargado de emoción y sentimiento. Llegamos a la culminación del desarrollo del personaje de Marion, y no puedo evitar sentirme admirada por lo lejos que la capitana ha llegado. P/D: Team Marcus forever.

"El señor de los anillos III -El retorno del rey" - de J. R. R. Tolkien




Con este libro di por terminada la saga de “El señor de los Anillos” (aunque todavía tengo pendiente leer “El Silmarillion” y otros cuentos de Tolkien”. Aunque el primer libro siempre va a ser mi favorito de la serie, tengo que decir que este tercer volumen también me ha gustado muchísimo. Las batallas son É-P-I-C-A-S, lo personajes se lucen en muchos momentos, y la narración de Tolkien sigue siendo tan maravillosa como siempre. No recuerdo haberme emocionado así con las escenas de acción en ninguna otra historia —y eso que ya tenía una idea de lo que pasaba por haber visto la película—,  pero este libro superó por mucho mis expectativas.

"El Bestiario de Axlin" de Laura Gallego



Aquellos que se hayan dado una vuelta por el índice de reseñas del blog saben que Laura Gallego es una de mis autoras de fantasía favoritas. Estoy segura de que muchos de ustedes ya están hartos de que todo el tiempo reseñe libros suyos, pero este es mi blog y hago lo que quiero, así que tendrán que soportarme (?). Ejem, como decía, este libro me ha gustado de principio a fin. Podría aburrirlos hablándoles nuevamente de todos los motivos por el que me pareció genial, pero creo que es mejor que vayan a ver la reseña que hice hace algunos meses por aquí.

Frankenstein de Mary Shelley




Fabuloso. Sigo sin poder creer que Mary Shelley haya escrito algo así a los dieciocho años. Profundo, desgarrador, y de una actualidad pasmosa. Pueden leer la reseña aquí.

"El retrato de Dorian Gray" de Oscar Wilde



Oscar Wilde es uno de mis autores clásicos favoritos, y tenía pendiente leer una de sus más grandes obras desde hace mucho tiempo. Este año finalmente me animé a darle una oportunidad, y no me decepcionó para nada. El retrato de Dorian Gray es un libro irónico y oscuro —una mezcla que no recuerdo haber encontrado en ningún otro libro antes— que nos obliga a asistir al proceso de corrupción del joven Dorian Gray, que cae en picada a causa del egoísmo y la vanidad que habitan en su alma y que se reflejan en su retrato. Imprescindible. Cuando pueda, les traigo reseña.

Los miserables de Victor Hugo



Sigo sin creer que no hubiera conocido antes esta maravilla. La verdad es que soy vagamente consciente de que, en el pasado, evité leerlo porque pensé que sería demasiado dramático. Ahora, después de haberlo devorado, puedo decir que si bien está lleno de miserias y sufrimiento, vale totalmente la pena. La crítica que hace Victor Hugo a la sociedad de aquel entonces es perfectamente aplicable a la sociedad actual. Quizás por eso es un clásico: caló tan hondo en el alma humana de sus personajes que, de alguna manera, este libro resulta atemporal. Cuando esté preparada para escribir sobre esta obra —ahora mismo me intimida mucho—, también les traeré reseña.


"El guardián entre el centeno" de J.D. Salinger




¿Quién diría que los vagabundeos de un adolescente por las calles de Nueva York serían tan interesantes? Holden Caufield es un chico que está molesto con el mundo, que juzga sin piedad la hipocresía de la sociedad aún cuando él mismo cae en comportamientos cuestionables de vez en cuando. Narrada en primera persona, esta novela nos presenta a un protagonista que busca rebelarse contra su entorno, pero que al mismo tiempo no puede terminar de desprenderse de él. Contradictorio como todo adolescente, Holden por momentos es totalmente sincero con el lector, y otras veces busca ocultar a toda costa siente. ¿De dónde sacará la fuerza para crecer? También les debo la reseña.


"Winter" de Marissa Meyer 



¡El primero que leí este año! Si bien el tercer libro de la saga, Cress, continúa siendo mis favoritos en muchos aspectos, Winter tampoco se quedó atrás. Además de las innumerables escenas de acción que encontramos aquí, me gustó especialmente porque hay varias escenas en la que los personajes principales se encuentran reunidos, y me parecen tan entrañables como grupo que no puedo evitar releer algunos de los diálogos que mantienen este libro de vez en cuando.  Tienen la reseña completa aquí. ¡Ah! Y aprovecho la oportunidad para hacer un poco de trampa y agregar a este top ten las dos novelas gráficas que acompañan la saga (Wires and Nerve I y Wires and Nerve II: Los Rebeldes), cuyas reseñas pueden encontrar aquí y aquí.

***

¡Y eso es todo! He leído algunos libros más, pero estos fueron mis favoritos. ¿Cuáles son los que más les gustaron a ustedes?

¡Espero que empiecen el 2019 con mucha energía y ganas de emprender nuevos proyectos y descubrir libros nuevos!



Con tecnología de Blogger.

© Donde Llueven las Palabras, AllRightsReserved.

Designed by ScreenWritersArena